¿Amar y juzgar son compatibles?
Publicado el 2 julio, 2014
Cuando juzgas, no estas amando… y te cierras a la solución. Amar no es cosa de “ser buena gente” sino de practicidad.
Puedes aprender a distinguir entre juzgar, observar, evaluar:
Al observar, puedes mostrarle sus hechos, algunos conscientes y otros inconscientes, así como las consecuencias de su comportamiento en la relación y en los resultados. Facilitas que la persona tome responsabilidad sobre lo que hace.
Al evaluar muestras y compartes tus criterios, valores e inquietudes ofreciéndole así la posibilidad de incorporarlos y de comprender tu posición sin sentirse juzgado. En todo caso, se sentirá responsable de lo que ha hecho. Es observar y evaluar desde la apertura y enfoque múltiple. Cuando te posicionas en el amor, te centras en la mejor solución, no en mantener tu razón.