La sensación de creer ser una impostora, de haber engañado a los demás para parecer más competente y talentosa de lo que soy en realidad, tiene nombre. La profunda y a veces paralizante creencia de haber recibido algo que no me merezco y de que en algún momento me descubrirán. Esa sensación y esa profunda creencia tienen nombre. Se llama el síndrome del impostor o el fenómeno del impostor.

El Fenómeno del impostor es esa experiencia interior cuando creemos que no nos merecemos lo que tenemos, que no nos merecemos estar dónde estamos.Nos sentimos “impostores” cuando no vemos nuestros logros atribuibles a nuestras capacidades sino al resultado de la suerte, a nuestro don de relaciones, a haber trabajado duro o al habernos sacrificado.

Tememos estar engañando a los demás y que estos descubrirán que no merecemos estar aquí porque no estamos a la altura. Pensamos que no somos tan inteligentes como los demás y tememos exponer lo que creemos que son nuestras verdaderas aptitudes -o la falta de estas -.

Y aunque nos sentimos solos en esta sensación, la “experiencia del impostor” es algo que casi todos experimentamos en algún momento de nuestra vida. Por alguna razón tenemos esta idea distorsionada de nosotros mismos. Vivimos sin darnos cuenta que esos pensamientos y sentimientos se retroalimentan hasta hacerse realidad y nos hacen tirar la toalla.

No dejes que tu sensación de poder se esfumé. Tanto creer que tienes poder como si crees que no, provocará consecuencias enormes en tu vida.

Únete a mi blog.